El Porsche 919 fue un muy exitoso prototipo híbrido que dominó durante años la categoría LMP1 del mundial de Resistencia, ganando tres campeonatos de forma consecutiva de 2015 a 2017. En el 2018, ya con el 919 retirado de su categoría, Porsche le dio su despedida con su versión definitiva, el 919 EVO, que tenía un solo objetivo: ser más rápido que cualquiera, incluso que un Fórmula 1…información y videos a continuación...
En el 2018 Porsche logró demoler el récord absoluto de Nürburgring Nordschleife que se mantenía invencible desde hacía 35 años (y que había sido logrado por otro Porsche, el mítico 956 de Grupo C, pilotado por el legendario Stefan Bellof). Esos 6:11.13 de Bellof de 1983 parecían imbatibles, por eso el 5:19.546 del 919 Evo suena como algo de otro mundo… ¿pero cómo lo hicieron? Básicamente, saltándose muchas, muchas reglas…
Los LMP1 están limitados por muchas regulaciones. Solo con quitar el regulador de flujo que restringe la cantidad de combustible le permitió al Evo tener 220 caballos adicionales a los 500 que brindaba originalmente esa maravilla motriz que es el V4 2 litros turbo que lleva el 919. Además, sin el limitante de energía de recuperación que puede obtener para el motor eléctrico la misma se vio incrementada de 6.37 a 8.49 megajoules, con lo que incrementó su potencia de 400 a 440 caballos. Con esto, 919 Evo tenía 1.160 caballos (27% más que los de su spec regular de carreras), una potencia tremenda para un vehículo de apenas 849 kg de peso en vacío, 39 kg menos que el 919 original al no necesitar aire acondicionado, limpiaparabrisas, faros y otros dispositivos eléctricos y de seguridad usado en las carreras de Resistencia.
Otra regulación que pudo ignorar para este “ataque total” fue el tema aerodinámico. Generalmente limitados por el tamaño y tipo de ayudas aerodinámicas que puedan utilizar en carrera, en este caso no hubo límite alguno y los ingenieros de Porsche crearon un sistema de aerodinámica activa, que usa hidráulicas para poder cambiar el ángulo de ataque tanto del difusor delantero como del alerón trasero dentro de la misma vuelta. Además, Porsche agregó faldones laterales (prohibidos en la mayoría de las competiciones del mundo motor), para atrapar el máximo flujo de aire. De esta forma el auto puede incrementar notablemente el agarre (53% más que el del 919 original) y reducir arrastre en las rectas. La eficiencia aerodinámica general era un 66% superior a la del 919 estándar. A todo esto se le suma que Michelin creó neumáticos especiales de un compuesto super blando específicamente para el 919 Evo y que el sistema de frenos, con vectorización de torque, fue mejorado con mayor número de sensores que aplican la presión óptima de frenado, deteniendo el auto lo más rápido posible y manteniéndolo al neumático en el límite del agarre.
Interesante entrevista subtitulada con el piloto Neel Jani que nos muestra el funcionamiento del volante del 919 Evo y detalles sobre su manejo…
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Con todo esto, Neel Jani logró un tiempo de 1:41,77 en Spa, más de 12 segundos más veloz que el tiempo de pole del 919 Hybrid estándar (1:54,097), y lo que es más sorprendente incluso más veloz que el tiempo de pole de Lewis Hamilton y su Mercedes F1 del 2017, que había sido de 1:42,553. Jani marcó una tremenda máxima de 359 km/h en la recta Kemmel del circuito belga, y logró una velocidad promedio de 245.61 km/h
Su récord en Spa puede no haber durado demasiado, ya que en ese mismo año Vettel y su Ferrari marcaron un 1:41.501, pero sin dudas demostró estar al nivel de un F1 y fue una gran despedida para un auto muy ganador. Y dejó como frutilla del postre ese récord absoluto en el Nordschleife que puede esté ahí un buen tiempo…
El video del récord absoluto en Nürburgring…
En breve más novedades, ¡saludos!
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